Las entidades trasplantadas frecuentemente tienen vagos recuerdos del mundo dejado atrás. Esto es particularmente cierto cuando las circunstancias requieren que la entidad viva en una forma de vida radicalmente diferente a la anterior, o cuando el mundo presenta un entorno extraño. Los antiguos humanos encarnados en el futuro en un mundo formado deben encontrarse a sí mismos con extraños recuerdos mientras van a la deriva entre los picos y los valles del suelo marino, un sentimiento de déjà vu. Si es posible, la entidades transplantadas que experimentan fuertes añoranzas, son algunas veces trasplantadas de vuelta a su lugar de origen cuando se gradúan a la 4ª Densidad. Para los antiguos humanos transplantados a un mundo acuático durante la Transformación de la Tierra a una 4ª Densidad de Servicio-A-Otros, volver de vuelta a casa es una posibilidad real. Si han elegido la orientación del Servicio-A-Otros, puede ser una simple petición rápidamente cumplida.